La accesibilidad en los ascensores y la normativa EN 81-70:2018

La accesibilidad en los ascensores es esencial en nuestra búsqueda de una sociedad inclusiva. Estos no son solo medios de transporte vertical; son puentes que conectan a las personas, permitiendo que todos, independientemente de sus capacidades físicas, accedan a cada espacio con dignidad y facilidad. Un ascensor accesible no solo cumple con una normativa; es un compromiso con los valores de igualdad y respeto por la diversidad humana.

La normativa sobre las dimensiones de los ascensores

La normativa EN 81-70:2018 es como el faro que guía el diseño de edificios accesibles. Nos enseña cómo crear espacios donde todos, sin excepción, puedan moverse con libertad y seguridad. Imagina un mundo donde cada ascensor es una puerta abierta a la inclusión: eso es lo que esta normativa busca hacer realidad.

¿Qué dimensiones mínimas debe tener un ascensor accesible?

¿Has pensado alguna vez en lo vital que es el espacio en una cabina de ascensor? Según la EN 81-70:2018, las dimensiones de los ascensores no son arbitrarias. Por ejemplo, para que una silla de ruedas maniobre sin problemas, se sugiere una cabina de al menos 110 cm de ancho por 140 cm de profundidad. En situaciones donde el espacio es un lujo, la normativa se adapta, proponiendo soluciones creativas para que nadie se quede atrás.

Y cuando las dimensiones ideales no son posibles, no todo está perdido. La tecnología viene al rescate con sistemas de voz para quienes no pueden ver, y controles a la altura de una silla de ruedas, asegurando que el acceso sea universal.

¿Qué soluciones de accesibilidad existen?

La accesibilidad va más allá del tamaño. Se trata de controles intuitivos, señales que guían sin confundir y seguridad que protege a todos por igual. Imagina botones al alcance de todos, con Braille para quienes lo necesitan, y alertas sonoras que anuncian cada piso, haciendo que cada viaje sea una experiencia segura y cómoda.

La accesibilidad en ascensores no solo se limita a las dimensiones de la cabina, sino que también incluye elementos como controles de operación accesibles, señalización adecuada y características de seguridad específicas. Estos elementos son esenciales para garantizar que los usuarios con diversas discapacidades puedan utilizar el ascensor de manera segura y eficiente. Por ejemplo, los controles a baja altura y en Braille son cruciales para personas con discapacidad visual, mientras que las señales auditivas y visuales ayudan a aquellos con discapacidades auditivas. Estas características son fundamentales para crear un entorno verdaderamente accesible y cumplir con la normativa EN 81-70:2018.

Los ascensores accesibles

Con la EN 81-70:2018, no solo estamos siguiendo una normativa; estamos construyendo puentes hacia un mundo más inclusivo. Es un compromiso con la igualdad, asegurando que cada ascensor sea un paso más hacia una sociedad donde todos tienen lugar.

Para profundizar en la normativa EN 81-70:2018 y temas relacionados con la accesibilidad en ascensores, se recomienda consultar los documentos oficiales de la normativa y guías de accesibilidad disponibles en los sitios web de organismos de normalización y asociaciones de accesibilidad. Estos recursos ofrecen información detallada y actualizada que puede ser de gran utilidad tanto para profesionales del sector como para el público interesado.

Si deseas más información sobre nuestros ascensores accesibles, puedes ver nuestra galería de elevadores o ponerte en contacto con nuestro equipo para que te puedan asesorar de la mejor manera posible.